En 1996, Zaragoza conocía a la que sería una de las jóvenes poetisas contemporáneas de nuestro país: Loreto Sesma.
Las letras de Loreto salían vestidas de canciones a la edad de 9 años y en 2013 consiguieron morder corazones a través de la plataforma YouTube. A los 20 ya tenía tres poemarios publicados comenzando por aquel que nos llevó a la costa: Naufragio en la 338 que sería, según la escritora, «un conjunto de errores, heridas y cicatrices curadas con saliva.»
2015 fue el momento de 317 kilómetros y dos salidas de emergencia, con el que conoceríamos el proceso de madurez literaria de una niña que sabe luchar contra sus bestias. En 2016 disparaba el tercero de sus libros, Amor Revólver, donde perdimos el miedo a apretar el gatillo.
El éxito de Loreto no es en vano, su manera de acariciar el amor y el dolor ha traspasado también las fronteras de México y Argentina. En 2017 consiguió hacerse con la XXXIX edición del Premio Internacional de Poesía Ciudad de Melilla con “Alzar el duelo”. En el poemario, trata el amor desde las diferentes etapas que todos atravesaremos algún día: negación, ira, negociación, depresión y aceptación.
Este año, la veinteañera ha decidido dar un paso más en su trayectoria dejando algún que otro sueño de lado y centrándose en el lanzamiento de su próximo libro » La Princesa»:
https://www.instagram.com/p/BvuR33ggj4O/
Apoyada siempre por promesas del verso como Rayden, Benjamin Prado o Irene G punto, Loreto ha decidido tirarse a la piscina:
«Es el primer libro que escupo en prosa y el primero que esculpo con vértigo pero alentada, al mismo tiempo, por el reto más grande al que me he enfrentado hasta el momento. Es una locura que ojalá esté a la altura, un libro escrito con la intensidad, adrenalina y peligro de un kamikaze.»
La niña que aprendió a definir la tristeza con versos, ha vuelto a sacar las armas.
https://www.instagram.com/p/BvetWudAMGI/
Su nuevo libro saldrá a la venta en Mayo de este año y con él esperamos ver a Loreto «alzar el vuelo» profesionalmente. El talento de esta princesa, está escrito en su piel.
