¿Sabías que el acné podría ser causado por la cosmética? La creadora de Maminat sí, y por eso fundó la marca.

¿Sabías que el acné podría ser causado por la cosmética? La creadora de Maminat sí, y por eso fundó la marca.

El acné no es solo cosa de la adolescencia más tierna. Cada vez son más pieles adultas las que lo sufren y los motivos pueden ser bien diversos. Muchas veces, las hormonas, la causa más común, no son el verdadero motivo de la aparición de los molestos granitos. Los componentes o substancias químicas de productos cosméticos y de maquillaje pueden ser los factores culpables o quizás, los que hacen que un acné no mejore o incluso empeore. Este tipo de acné se denomina acné cosmético y es precisamente lo que sufría Natalia Olmo, creadora de Maminat, una firma de cosmética natural que ha revolucionado por completo el mundo de belleza en nuestro país.

El precio de la cosmética antiacné, algo a tener en cuenta

Cuando Natalia fue diagnosticada de acné cosmético se percató del elevado precio que tenían los productos de cosmética más natural. Después de varios años estudiando los beneficios de la naturaleza en la piel, logró acabar con su acné y decidió compartir su secreto con el mundo, creando su propia marca, además, los productos son de lo más asequibles y es que oscilan entre los 5 y los 25 euros.

Las formulaciones de los productos son sencillas, están creadas a partir de plantas con fórmulas efectivas para el cuidado de cada tipo de piel y es que cuentan con hidratantes para todo tipo de cutis desde las más grasas hasta las más secas.

LO MEJOR, SOSTENIBILIDAD Y RESPONSABILIDAD CON EL MEDIO AMBIENTE

A día de hoy, la calidad y la estética de los productos cosméticos no son suficientes. El impacto medioambiental también importa. En Maminat son perfectamente conscientes de ello y la ética tiene un valor primordial en todos sus productos. No testan en animales, los envases son reutilizables (siendo el 90% de vidrio) y las material primas son sostenibles y no utilizan plantas ni aceites esenciales en peligro de extinción. Además las toallitas desmaquillantes son tejidas por mujeres en situación de vulnerabilidad social y las etiquetas de los productos son de papel mineral por lo que no se necesita talar árboles para hacerlas.