A pesar de tener actores muy influyentes como Carmen Maura, Carmen Machi y Luis Bermejo, Rainbow como obra cinematográfica deja mucho que desear.

 

El pasado viernes 30 de septiembre se estrenó en Netflix, Rainbow, una película española dirigida por Paco León, (Kiki, el amor se hace), que anteriormente debutó en cines el 23 de septiembre de este mismo año.

 

La película está catalogada bajo los géneros de drama, música, comedia y fantasía, aunque en lo personal la definiría como un drama que intenta meter toques de surrealismo.

 

En cuanto a los actores, la película fue protagonizada por Dora Postigo (Dora), quien además de actriz es modelo y cantante. Rainbow también cuenta con actrices influyentes como Carmen Maura (Alguien tiene que morir y Las Brujas de Zugarramurdi) y Carmen Machi, famosa por protagonizar a Aída en la serie del mismo nombre y ser parte del elenco principal de 7 vidas. Machi también ha participado en películas como La piel que habito, Ocho apellidos catalanes y El bar.

Dora Postigo interpreta a Dora

Para completar el elenco principal, al lado de Postigo estuvieron Luis Bermejo, (Campeones), Ayax Pedrosa, compositor, actor y cantante; y el diseñador, actor y cantante nigeriano, Wekaforé Jibril.

En la película, Dora se embarcará en un viaje para presuntamente encontrar a su madre, durante el cual conocerá y agregará a su grupo de aventurera a Muñeco, José Luis y Akin. Esto mientras la dueña de un imperio de bolsos de mujer (Coco), acusa a Dora de haber asesinado a su marido. Junto a Coco también estará Maribel, quien jugará el papel de bruja buena, haciendo “lo posible” por proteger a Dora.

Rainbow y El Mago de Oz

 Rainbow se define como ‘una historia moderna sobre el coming-of-age, inspirada libremente en la novela clásica el Maravilloso Mago de Oz, donde al igual que en el original, la protagonista tiene como objetivo volver a casa. La diferencia es que en la historia de Oz la casa es un lugar físico, mientras que en Rainbow es una persona.

Además del tema del hogar podemos encontrar otras similitudes entre ambas películas. El nombre de las protagonistas es parecido, Dorothy y Dora. Ambas niñas poseen un perro llamado Toto que las acompaña durante toda la aventura.

Los personajes que acompañan a Dora, son extrapolables a los compañeros que hace Dorothy siguiendo el camino de las baldosas amarillas; camino que vemos en Rainbow durante un viaje de carácter psicodélico.

Camino de las baldosas amarillas en Rainbow

Así, Muñeco en la película de 1939 es el Espantapájaros; en cada interpretación a ambos les “falta el cerebro”. José Luis por su parte es el Hombre de Hojalata, rendido ante la capacidad de amar (Al hojalata le faltaba el corazón). Este personaje lleva un juguete muy parecido al hojalata colgando en el espejo retrovisor del coche, y tiene una prótesis de pierna, que nos hace entender que es como un robot, lo que pasaba también con el personaje original.

 

El León Miedoso lo encarna Akin, una especie de DJ qué en el intento de meter el surrealismo dentro de la película, de repente se convierte en un león.

 

Glinda y Elphaba, las brujas del Mago de Oz podrían ser Maribel y Coco, aunque no hay aspectos que las vincule directamente. Lo que sí hay es una referencia continua a la Bruja Cruel del Oeste en las publicidades de la empresa de Coco; sus modelos aparecen pintadas de verde tal y como era la piel de Elphaba.

 

Buenos actores no significan buenas películas.

Como se mencionó anteriormente, Rainbow cuenta con reconocidos actores; incluso con la colaboración de Esther Expósito; más esto no es proporcional a su calidad. Como obra cinematográfica la película deja mucho que desear.

 

Los personajes son planos, y a excepción de Dora, ninguno tiene un objetivo definido, parecen seguirla a ella porque no tienen nada que hacer. No buscan nada para sí mismos, ni tampoco esperan nada de la protagonista.

 

A pesar de que Dora está huyendo de la policía por el presunto asesinato del esposo de Coco, esta situación no representa nada para ella, excepto en una secuencia donde tiene que huir de un hotel. Nunca parece que la protagonista esté huyendo de la justicia, ni que esta esté demasiado interesada en encontrarla.

 

Los diálogos pecan de antinaturales, siendo en muchos casos repetitivos e inseguros tanto a la hora de escribirlos como de interpretarlos. Por otra parte, hay muchas escenas que están ahí por capricho, pero no hacen avanzar la trama hacia ninguna parte. Rainbow como tal no termina de definir qué género quiere ser, ni tampoco que tipo de producto audiovisual, sin justificación alguna mezcla estéticas de videoclip y fashion movie.

¿Película o fashion movie?

Personalmente diría que lo único medio interesante de la película es la música, pero aun así no se integra correctamente con la historia. En el deseo por agregar el género musical le dan a Dora el don del canto, aspecto del personaje que al final no aporta nada a la trama. Es un capricho que si se quitara no afectaría en lo más mínimo.

El Mago de Oz no tiene absolutamente nada que envidiarle a Rainbow, y es mejor invertir el tiempo en revisionar la película de 1939, que ver esta adaptación libre en cine o incluso en Netflix.