Con la llegada de Instagram, el mundo del arte sufrió una auténtica revolución. La red de fotografía se convirtió rápidamente en una herramienta de difusión que lograba que el arte llegase a cualquier rincón de la tierra, pero a su vez, hizo que el arte se transformase, obligó a una originalidad mayor y supuso un auténtico triunfo de la cultura más pop en las obras artísticas.

En todo este apogeo y oferta de cientos de artistas multidisciplinares, ha habido algunos nombres que han sabido pisar fuerte y hacerse un hueco en el panorama. Una de ellas es Sara Shakeel, una artista que pone cristales y glitter a sus obras fotográficas, a modo de collage, siendo esta su mayor seña de identidad.

Bien sea adornando estrías, fluidos corporales o a célebres personajes como Rihanna, Miley Cyrus o Marilyn Monroe, Sarah ha logrado hacer de sus diseños glitter todo un sello personal.

https://www.instagram.com/p/Bsgi66slunF/

https://www.instagram.com/p/BqiMvrulngS/

Más allá del collage creado digitalmente, Sara también cuenta con obras en las que los cristales son aplicados de forma manual.

https://www.instagram.com/p/BrdRQbnlYq-/

Sara Shakeel consigue crear con su obra un universo onírico, con referentes pop mezclados con otras obras más clásicas como vírgenes u otros personales del arte más clásico inspirado por la religión.

https://www.instagram.com/p/BqnBGzKF7dH/

https://www.instagram.com/p/Bp2y-6BFOjU/

Shakeel adorna con su brilli-brilli rostros, cuerpos y también paisajes. Pero esto no es lo único que hace, esta artista pakistaní se centra en el collage y aunque ha logrado a través de los cristales forjar su seña identitaria, también realiza otro tipo de obras, que no necesitan de purpurina para brillar.

https://www.instagram.com/p/BlZBijqlFSu/

Actualmente esta ex dentista convertida en artista acumula más de 600.000 seguidores (y subiendo) en Instagram, es ganadora de un premio a la mejor artista visual de 2018 por Glamour Italia y sus obras de espíritu millennial no paran de conquistar a todas las generaciones.

No hay duda de que Sara Shakeel, al igual que su obra, sabe brillar.