The Staffroom, primer largo de Sonja Tarokić, pone sobre la mesa las debilidades de una sociedad en la Sección Oficial de la 36 Mostra de Valencia.
Tras varios cortometrajes como Start Girls (2010), You Bitch! (2011), I’m a Self-Made Woman (2012) o On Shaky Ground (2014), Sonja Tarokić ha estrenado The Staffroom en España en la 36 Mostra de Valencia. La joven directora croata desarrolló la idea del largometraje en el TorinoFilmLab’s Script&Pitch durante el 2015 y el programa FrameWork durante 2016.
Marina Redžepović es quien da vida a Anamarija, una orientadora escolar que aterriza entusiasta en un colegio de primaria de Zagreb. Su trabajo le apasiona y resolver los conflictos de los pequeños es aparentemente sencillo para ella. Pero no tarda en tropezar con la realidad y descubrir los puntos débiles del sistema educativo.
Poco a poco salen a flote y se hacen evidentes, tanto para ella como para nosotros como espectadores, las jerarquías más incrustadas, el tipo de personas con las que tiene que lidiar y las complejas relaciones entre profesores, padres y alumnos. La difícil comunicación entre ellos y los juegos de poder constantes suponen un gran reto para la protagonista, que cuanto más conoce el ambiente que la rodea más confusión e impotencia siente.
La lucha de Anamarija contra el sistema la coloca en una encrucijada. ¿Qué es lo que tiene que hacer para mantener su integridad? ¿Ante ciertos problemas es mejor cerrar un ojo o actuar por una educación mejor para las futuras generaciones? ¿Qué implica actuar y cómo es mejor hacerlo?
Ponerse en el lugar de los demás
La fortaleza del guion y la dirección de Tarokić está en la construcción de los personajes y la visión de los mismos como individuos, cada uno con sus virtudes y defectos.
“El mayor reto fue asegurarnos de que el público pudiera sentir empatía por todos los que forman parte de este claustro de profesores», ha asegurado Sonja Tarokić en la presentación de The Staffroom. Sin duda lo ha conseguido y eso hace mucho más interesante su propuesta, que cuenta con una elegante puesta en escena.
Cabe reconocer también el honesto trabajo de la actriz Marina Redžepović en su primer papel grande. Casi todos los planos de la película cuentan con su presencia y la historia cobra fuerza gracias a su interpretación. La actriz consigue transmitir esa seguridad e inseguridad que van de la mano hasta el final.
El potente mensaje social de The Staffroom
Este colegio y sus fragilidades son en realidad una metáfora de la sociedad y comunidad croata, un pequeño mundo que representa el funcionamiento del país. Y es que la escuela es donde los niños y adolescentes pasan la mayoría de su tiempo, donde crecen, aprenden y maduran. Por eso lo que ocurre dentro de la institución es reflejo de lo que ocurre fuera y viceversa.
Tarokić creció en en una familia de psicólogos, lo que explica bastante bien su potente mirada y mensaje social en esta obra (y en las anteriores). ¿Es posible salir de esta tendencia cíclica plagada de tensiones? ¿Existe una tercera opción en la que no salgan perdiendo ni el sistema ni los individuos?