Pipiolas: Pertenecemos a Malasaña pero San Vicente Ferrer nos da un miedo que te cagas

El dúo Pipiolas, formado por Adriana Ubani Álvarez y Paula Reyes Morillas, acaba de sacar su EP: El verano que me debes. Y es que a veces de compartir un verano con el corazón roto, además de una amistad muy especial, nace un disco.

Paula y Adriana nos cantan sobre los daños colaterales que permanecen tras salir con un narcisista… También reivindican otros asuntos importantes, como que Wonderwall no deja de ser un temazo porque los modernos lo hayan decidido así. Están aquí para ‘monetizar el trauma’ y nos lo explican en esta entrevista llena de risas, sororidad y admiración mutua.

Coolturize: Os conocisteis en la RESAD, pero Pipiolas se formó una vez acabasteis y tomasteis caminos diferentes, ¿cómo surgió este reencuentro?

Adriana: Es verdad que en la RESAD teníamos muy buen trato, pero nuestra amistad como tal comenzó después, sobre todo en la cuarentena, que echamos muchas horas hablando por videollamada.

Paula: Y Pipiolas empezó el verano pasado. Yo empecé a escribir canciones sin ningún tipo de pretensión, pero luego al producirlas y ver que sonaban bien pensé: de cara a sacarlas no me apetece hacerlo sola, molaría hacer una banda de modernitas jaja. Y tal cual se lo dije a Adri, es gracioso porque tenemos el audio aún.

Adriana: Y la foto que le mandé yo emocionadísima, acompañada de un “sí, me encantaría, ¡qué guay!”. Fue porque Paula pensó en mí :).

Paula: Y me dijo ella que sí :).

PIPIOLAS. Fuente: Pablo Gil García (@pabloanyway)

C: Paula, en la presentación del vinilo en Marilians dijiste una cosa muy bonita, que se cerraba un ciclo. Que este verano había ido bien mientras el pasado escribías ese “me debes un verano, porque el anterior me lo pasé llorando por ti” ¿Cómo os sentís habiendo llegado hasta aquí en tan poco tiempo?

P: Es muy fuerte, porque Narciso no salió hasta enero, o sea, ha sido hace nada.

El otro día me emocioné un montón porque una amiga de Adri hizo un montaje, así cutrillo, de estos en los que aparece primero el videoclip y luego ya se nos ve a nosotras en directo.

A: Claro, es que eso es algo que yo he visto con videos de Harry Styles, de repente aparecer nosotras… te puedes imaginar.

P: Jajaja, yo le mandé un audio llorando a Adri: “es que para mí esto es el resumen de todo”. Porque claro, cuando escribí la canción estaba en la mierda, pero coincidió que Adriana ese verano también. O sea, el vinilo se llama “Me debes un verano” porque de verdad fue horrible. Y que te deban un verano creo que es lo peor, prefiero que me deban un invierno, que seguro que hay alguien más triste acompañándome, aunque sea la temperatura… Pero el momento deber un verano, es el mayor robo. Es un robo a mano armada.

Y que te deban un verano creo que es lo peor, prefiero que me deban un invierno

A: Total. Y que además el verano siempre tiene esa tendencia nostálgica, que te atrapa súper rápido para abajo. Es como que está feo estar triste en verano, ¿sabes? En invierno estás activo, tienes otras cosas… pero en verano es como: plof.

P: fue un verano terrible, y vernos el de este año subidas en un escenario, cantando con todo completamente superado… Porque sí, ya habíamos vivido otras rupturas, y sabíamos que de amor nadie se muere. Pero duele igual, y lo único que quieres en ese momento es que se pase rápido. Entonces eso, ahora, que estamos en nuestra mejor etapa… Siento que la vida nos está haciendo bizums todo el rato. Me siento en paz.

Siento que la vida nos está haciendo bizums todo el rato.

C: Las cuatro canciones que forman el EP son muy diferentes entre sí, aunque tengan vuestra esencia muy marcada ¿es la experiencia el punto de unión entre ellas?

A:  Sí, justo, es un poco lo que dijo Paula el otro día: Pipiolas nace porque nace Narciso y no al revés. Las dos tuvimos la mala suerte de encontrarnos con una persona narcisista que, si lo hace bien, te destroza. Y con nosotras lo hicieron muy bien, fue un tema muy recurrente que hablar en las videollamadas de cuarentena que mencionábamos antes.

P: Y luego, aunque Narciso sea como tal la canción que obviamente va enfocada a esto, el resto son un poco las consecuencias y las taras que te deja. Al final: Un Poco Triste es una carta que le hago a mi depresión; El Club De Los 27 es todo este rechazo social que provoca el que, cuando con quien te relacionas esté dentro de un ámbito de modernos. Todo lo que esto supone en tu poderío, en tu confianza, en ti misma; y Domingo Raro, que es la cosa de: yo estoy sana, yo quiero querer bien y no me dejan, no me dejan porque sólo me tratan mal. Tenemos también la versión de Lizzie McGuir, que esa sí fue por gusto jaja.

C: Abrís el EP con El club de los 27, donde se escucha una frase con un tono irónico diciendo “Va que sí, que eres el más moderno”, y cerráis con “Que os jodan y viva Wonderwall”. Por tanto, ¿Pipiolas declaran bandera blanca o muerte a la modernez?

P: La voz que lo dice es nuestra amiga Eva, que es un poco la que unió, y es de Valencia. Entonces le sale ese ramalazo tete…

A: Dijimos, pa’ insultar, Eva, jajaja.

P: Las risas que se escuchan al final son de Albanta, nuestra Manager, con la que hemos hecho todo el concepto de Pipiolas. Como estaba con Eva cuando grabó el audio coló la carcajada, en plan “quiero salir yo también” jajaja.  Diría que la bandera blanca es para quien reconoce que Wonderwall es un temazo.

A: Claro. De repente es como de modernos decir que no lo es, o que los Beatles no eran tan buenos. Y es como, oh perdóname, que el resto del planeta nos hemos equivocado y tú eres quien tiene razón. Ha llegado un punto en el que parece que para pertenecer tienes que hacerlo de una forma súper específica, y si no lo haces de esa manera, no entras. Para nosotras la supuesta modernez a la que también pertenecemos no es esa, es el “tú estás haciendo tu movida, yo la mía, y a ver cuánto nos podemos retroalimentar”.

P: Justo, no el: ¿Te gusta Oasis? Dime tres canciones que no sean Wonderwall… existe este parámetro en el que te dicen dentro de lo moderno lo que puede molar y lo que no. Y yo siempre me he sentido, creo que Adri también, una pringada. No quiero que me pongan el pin de “tú molas”, que ya encima, siendo tía, tienes que demostrar mucho más. No queremos molar. El resumen sería: pertenecemos a Malasaña pero San Vicente Ferrer nos da un miedo que te cagas.

A: San Vicente Ferrer nos da ansiedad.

No quiero que me pongan el pin de «tú molas». No queremos molar.

C: Y de la modernez pasamos a Domingo Raro, en la que cantáis con la actriz Bego, ¿cómo se da esa colaboración?

 P: Bego es amiga nuestra, Adri la conoció a raíz de Pipiolas, porque al final somos un matrimonio: sus cosas, sus amigos, su familia, son los míos y viceversa. Bego canta y le encantaba Pipiolas, estuvo desde el nacimiento, pero como es sobre todo reconocida como actriz le apetecía empezar en compañía. Así que le enseñamos dos canciones y dijo que le apetecería mucho participar en esta, y escribir unos versos.

A: Así fue. Mola además que la primera colaboración que hayamos hecho haya sido también con una actriz a la que le gusta cantar. Son como muchas similitudes. De hecho, cuando ya la conocí un poco más fue como el meme de los Spiderman señalándose “¿Tú eres sagitario? ¿Tú también?” Tuvimos  un match guay.

C: ¿Y tenéis alguna pensada otra colaboración que os hiciera ilusión?

P: Amaia, por ejemplo, es referente sine qua non para mí. Como bandas molan mucho Mujeres, Ginebras, Carolina Durante… Son grupos de los que bebemos.

A: Son referentes de lo que hacemos, ya sea por caminos que han abierto, el tipo de música, tipo de mensaje… al final todos conectan con algo.

C: El videoclip de Domingo Raro es una conversación de Pipiolas en el que las lyrics van apareciendo en un chat, ¿os inspiráis en mensajes que enviais u os hubiese gustado enviar?

A: Claro que aquí están más poetizadas, pero sí que alguna me hubiera gustado soltarla en realidad.

P: Igual no enviado, pero yo creo que sí los he verbalizado. El: déjame quererte… Yo no quiero regañarte, yo no quiero estar enfadada, quiero que te dejes querer. También te digo, espero no tener que usarlo más jajaja.

C: Hasta qué punto las letras son autobiográficas, ¿alguna tiene un vinilo de Miguel Bosé?

P: si alguien me regalase hoy un vinilo de Miguel Bosé, me sentiría algo rara jajaja. Cuando lo escribí lo llevaba a los vinilos de nuestros padres, que van mucho con el tipo de música que más me gusta: la Movida Madrileña, años ochenta… Es más como el concepto del recuerdo que algo explícito.

A: Y yo un abrigo de piel casi que no me pondría jaja. Es el concepto de algo que heredas, que tiene ese valor pero… no.

C: Me debes un verano/ porque el anterior me lo pasé llorando/ por ti, son versos de vuestra canción Narciso. Estáis haciendo terapia a muchas chicas que os escuchan, así que, ya para rematar ¿Qué les diríais sabiendo que están pasando por algo así?

A: Pues tengo un montón de cosas que decirle. Lo primero, que me hubiera gustado que me dijeran mucho antes es, que no es tu culpa. Puede que tengas parte de la responsabilidad (me gusta más responsabilidad que culpa, que parece que pesa) porque al principio te parecía bien, pero es que te han manipulado. Él, que puede ser ella, pero normalmente es él, ha hecho el trabajo perfecto para que cuando llegue la bofetada, estés en el sitio que quiere que estés, y te la lleves.

P: No es que te hayas montado una película solita, es que él te ha puesto el escenario, los focos, el guion… todo. Eres humano, vives, y lo que están haciendo es engañarte, love bombing, gaslighting… Todo lo acabado en -ing que te puede hacer este tipo de gente.

A: Es que aún con estás, siempre ponemos el peso en la responsabilidad que tiene la tía, y no. En el “era un cabrón pero tú seguías con él”, ya pero es que no lo fue desde el minuto 0, al principio parecía una persona maravillosa con la que iba a compartir un proyecto de vida.

Siempre ponemos el peso en la responsabilidad que tiene la tía, y no.

PIPIOLAS. Fuente: Pablo Gil García (@pabloanyway)

P: Así que le diríamos que cuando abra los ojos, sabemos que duele mucho, pero, le repetimos que de amor nadie se muere. Es como una noria, acaba pasando. Sobre todo, también hacernos caso entre nosotras, el “amiga date cuenta” parece una broma, pero es verdad. Y a veces pasa que luego esta persona se lleva un escarmiento cuando está con alguien que le pone los puntos sobre las íes, que le puede servir de aprendizaje.

A mí muchas veces me han dado las gracias y yo les digo “no me des las gracias págame la terapia” yo no tengo la carrera ni de enfermera, ni de psicóloga, me alegro que ahora te vaya muy bien porque no se lo vas a hacer a otra chica, pero a mí me has destrozado.

Vuelvo al: amiga date cuenta, si a ti una persona te está avisando de lo que le hicieron, no caigas en la otra versión de “mi ex estaba loca”, si decides tomar partido dale una chance, siéntate con ella a hablar, porque lo mismo después te lo puede hacer a ti. La sororidad es muy importante. Y ahora puede haber cambiado y ser maravilloso contigo, pero no caigas en juzgarle a ella, porque sus vivencias fueron distintas. Me duele tanto cuando la novia a posteriori entra al trapo, o te insulta…

A: es como… Nena, eso no es muy feminista por tu parte.

C: Y cerráis el EP de Pipiolas con Un poco triste 🙁 ¿Por qué de repente una canción en inglés? sin tener en cuenta las dos últimas frases.

P: Yo el otro día dije que es un error, en cuanto a que somos un grupo en español y nuestro público no incluye al anglosajón, no me malinterpretéis, que ojalá. Otros grupos también nos comentaron el “pero por qué hacéis esto” y yo dije, es un error, pero Adri me cambió la forma de verlo.

A: Es que no estoy de acuerdo. A mí me gusta mucho leer sobre psicología, y así descubrí una forma de disociación: que ocurre que, cuando algo te es muy difícil de hablar suele ser más fácil exteriorizarlo en otro idioma (si tienes las herramientas suficientes para expresarte). Te da como ese distanciamiento. Hablar de cosas tan dolorosas en tu lengua materna, y notarlas tan cercanas, puede asustar mucho, agobiar, sentir que no te estás expresando del todo… Y puedes pensar “manda narices que me esté expresando mejor en un idioma que domino mucho menos” pero porque te permite no sentirlo tan tuyo, tan visceral, ¿sabes?

Hablar de cosas tan dolorosas en tu lengua materna, y notarlas tan cercanas, puede asustar mucho.

P: Yo cuando me lo contó pensé “no, porque yo siempre he podido hablar absolutamente de todo”. Pero le di una vuelta y Adri tiene toda la razón. Cuando la escribí fue cuando me empecé a medicar por la depresión, y estaba en el peor punto, ni siquiera yo entendía qué me estaba pasando. Al final es una tristeza profunda que no comprendes, ni sabes de dónde te viene, ni la puedes achacar a nada, y… no era capaz de hablarlo en mi lengua.

Totalmente lo siento así, es algo que no hubiera podido explicar en castellano, y el cerrarlo ya en mi idioma, que fue de manera natural, con ese «ayer te llamé por si vas a volver, pero tú respondiste que no»… siento que me lo estaba diciendo a mí misma.

C: El videoclip de esta canción está grabado en Canarias, tu tierra Adri, ¿tiene algún mensaje o es por la estética?

A: Como la canción está cargada de nostalgia, queríamos que el video también lo estuviese. Así que la idea pretendía que pareciese los videos que tus padres grabaron en sus vacaciones de jóvenes.

P: Antes de que se separasen jajaja, cuando aún eran felices. El momento en que coges la cinta VHS, ves a tus padres casándose y tú pensando “mamá la que te iba a caer” jajaja, pero ellos están grabando en plan “Sonríe Paco” y luego resulta que Paco le daba palizas a tu madre. Sobre Canarias, porque no hay color, de bonito y, porque aunque nos hayamos conocido en Madrid y el grupo esté fundado aquí, en nuestra música sigue sonando la S de Adri, ella “senar” y sus cosas, las dice.

A: Jajaja, aclaro que los padres de ambas siguen juntos. Canarias pues… el hate que me caiga, porque es más bonito, es precioso, mi casa es muy chula, y fin.

C: Y habiendo estudiado las dos interpretación, supongo que los videoclips son algo muy importante para Pipiolas.

P: Sí, tanto en cuanto a interpretación como a estética.

A: Justo, porque al final, el arte en general y el teatro sobre todo (que a veces parece que tiene que ser dos sillas y gente hablando) es una cosa estética. No sé qué profe me dijo en la carrera que todo lo que pusiese en escena iba a tener un significado, aunque yo no se lo estuviese dando. El espectador al estar ante el escenario, los focos, ese lugar un poco sagrado… siempre le va a dar un valor.

P: de hecho el primer videoclip que hicimos es un guiño a la comedia del arte, al siglo de oro, y a que somos las dos actrices. Empezamos con nuestras raíces, digamos.

C: Actuais dentro de poco en Sevilla ¿tenéis ganas? ¿Estáis emocionadas por vivir la música en directo?

P: ¡Muchísimas! Encima es un festi de tres días donde estaremos rodeadas de nuestros compañeros… En cuanto nos lo dijeron nos pusimos a saltar de la emoción.

C: Elefant Records habla de Pipiolas como diamantes aprendiendo a brillar, ¿qué supone  que hayan aparecido en vuestra vida?

A: Un ángel de la guarda, un beso en la frente, un “en serio”. Fue un regalo, el otro día con Dani y con Miriam de Marilians lo estuvimos hablando… Y es que todo el mundo tiene siempre buenas palabras para la gente de Elefant, y nosotras solo podemos añadir. Son gente que te hace sentir súper bien con lo que haces, que confían en ti, y confían porque de verdad les gusta lo que haces. Es gente que reafirma muchísimo, su lenguaje afectivo es ese, y Paula y yo agradecemos muchísimo las palabras de reafirmación. Entonces no sé, ha sido muy bonito.

Un ángel de la guarda, un beso en la frente, un “en serio”. Fue un regalo.

P: Separando que pertenecemos a un mundo capitalista, no mercantilizan la música. Que confíen en nosotras, que llevando toda la vida dedicándose a esto nos cojan y nos digan: lo que hacéis es bueno y es válido…

A: Es que justo, yo creo que además a nosotras dos, que siempre hemos sido las de “no, es que Fulana está loca” llegaron y nos dijeron “no estáis locas chavalas”. ¡A qué me echo a llorar y todo jaja!

P: ¡Dios es que literalmente es eso! Toda la vida dejándonos de locas, de “te equivocas, eso no es así”, han llegado dos personas que han confiado. Y ha sido como respirar y decir: qué bien que no hayamos dejado de intentarlo.

Se abrazan.

Llegaron y nos dijeron “no estáis locas chavalas”.

C: Paula tu escribes desde pequeña, ¿tienes algún referente de la literatura que te inspire a la hora de componer?

A: ¡Mira! tengo aquí en la estantería su libro. Paula Reyes: Lo que la abuela nos dejó: o la herencia de los nombres olvidados.

P: Es que te diré que lo que más me gusta hacer es escribir. Escribo novela y me puse a escribir canciones porque, parece un meme pero, como me habían roto el corazón de forma indie, no me salía escribir novela, era como muy sobrio. Así que me desahogué de forma indie haciendo canciones.

Pero más que incluso actriz, yo lo que siento que soy es escritora. Es lo que más me gusta hacer, donde mejor me siento. Y obviamente leo un montón y me curto de autores que me gustan… Pero no solo me inspiro en la escritura, también lo hago escuchando música, viendo artistas plásticos. Creo que hablo español y literatura. Es otro idioma, como al que se le dan muy bien las matemáticas y se siente comprendido en ese ámbito, pues yo aquí.

C: Y si tuvieseis que tatuaros algo de Pipiolas, ¿qué sería?

A: ¡Pues ya nos hicimos uno! En la Pipiparty. Es un arlequín, por el videoclip de Narciso.

P: Y si me tatuase una frase sería «monetizar el trauma», es que es nuestro lema.

“Monetizar el trauma”, es que es nuestro lema.

A: Sí, y de las canciones que hemos sacado yo me haría “idealicé todo tu olor”. O sea, es típico que digo: buah, parece que están hablando de mí. Tengo el problema de idealizar cosas súper concretas, de ir por la calle, que alguien huela similar, y que se me destroce el día. Aunque vaya, concuerdo que como concepto Pipiolas: monetizar el trauma.

P: Cuando escribí esa canción no me hice un tatuaje pero sí me corté el pelo, de ahí lo de «Soy Colón, te conquisté el corazón. Me corté el pelo y ya no estás», aunque prefiero pensar que me parezco más a Mia Wallace jajaja.

 

 

Paula Latiegui Muñoz

Periodismo y Cultura